Acojonada, sí señor, y no solo por la que se me viene encima, que también, pero como es algo que yo he elegido pues lo acepto, me aguanto y de momento lo tapo todo con ingenuidad, esperanza e ilusión.
El día que decidimos que queríamos ser padres, lo habíamos pensado muy bien (así nos pareció), creímos que estábamos preparados y bueno una serie de pensamientos que seguro que se han planteado los padres y que muchos a posteriori nos han dicho ¿Por qué no lo pensé más?
Pero bueno, aquí estamos mi sr ratón y yo a la espera de un bebe ratón, desde el día que sale las dos rayitas en el predictor empiezan los acojones, no quieres pensarlo pero lo piensas. Te acojonas, en mi caso en la primera eco hasta que le oyes el latido, luego que todo esté bien, y un largo etc… que conlleva el embarazo, podréis decir te acojona el parto, y en realidad no, es algo doloroso como otras cosas que pasamos en la vida, pero algo que nosotros hemos elegido, como el que se hace una operación de cirugía sabe que va a doler, quizá no te planteas que tanto pero aún así lo haces.
Pero lo que realmente me acojona y cada día más, es que la “paternidad” en general esconde un submundo de tendencias en la educación de tus hijos que a veces dejan poco espacio para el instinto, o eso es lo que estoy viendo desde mi punto de vista de “futura primeriza ingenua y atolondrada”, parece que todo está mal, expones una idea de cómo te gustaría educar a tus hijos y te llueven un aluvión de críticas, de consejos “bienintencionados” (entiendo yo), de anda “insensata” que no tienes ni puta idea de lo que dices, y entonces es cuando digo bueno quizá es que como no tengo experiencia efectivamente no sé lo que digo, pero cuando se expone otra idea totalmente al contrario también hay aluvión de comentarios. A veces cuando me preguntan ¿Y que donde vas a dar a luz? O ¿Piensas darle el pecho? Os juro que tengo ganas de decir “paso palabra” porque parece que diga lo que diga está mal.
Si digo, “me gustaría tener un parto lo más natural posible” me miran como si hubiese nombrado a Voldemort en una película de Harry Potter, ¡¡Horror!! una hippy de esas que paren en el monte, y yo digo no hombre no se trata de parir en casa(que lo veo totalmente aceptable quien lo haga), sino de que me gustaría que me dejasen libertad de movimientos hasta el momento del alumbramiento, siempre y cuando mi bebe este bien, me gustaría poder ponerme de pie o en cuclillas según me lo pida el cuerpo y no tener que estar monitorizada, o poder elegir el modo de parir, o intentar aguantar sin epidural, cuando digo eso me miran entre “no sabes lo que dices” y ¿Por qué? ¿Por qué pudiendo ponértela no quieres?, pues simplemente digo que lo que me gustaría es tener libertad para elegir, así que ya paso de explicarlo cuando me preguntan digo “ pues normal como todo el mundo” y cada cual que piense lo quiera.
Si digo “Me gustaría dar el pecho el tiempo que pueda” más de lo mismo, pero es que al contrario igual, recuerdo que se inicio un debate que acabo en trifulca porque una de mis amigas había decidió que lo mejor para su bebe era darle leche de formula porque no se quedaba satisfecho con el pecho… ¡¡Bueno, para que dijo nada!! “ Que si eso es que no le pones bien al pecho” “Que no se puede comparar” y a la insensata también se le ocurrió decir “A mí el médico me ha dicho que ya casi no hay diferencias, que las leches de formula aportan lo mismo que la leche materna” (yo entendí que la muchacha intentaba defenderse ante las otras leonas que a poco le estaban diciendo que era una mala madre, pero ojala no hubiese dicho nada) porque ahí estallo al guerra de verdad, os podéis imaginar mamas pro lactancia contra las mamas de biberón, y yo pensando para mí misma, ¿Por qué se pelean por esto? Está claro que cada padre piensa que hace lo mejor para su hijo, quienes somos los demás para venir a criticarle y decirle, “ehh tu mal padre, lo estás haciendo como el culo”, a mi desde luego no se me ocurre.
La discusión se zanjo con que cada una se fue a su casa con su retoño y acordándose de los parientes de otras.
¿Si yo decido que lo mejor es practicar con mi hijo colecho, porque es la única forma de que se duerma y porque me gusta? ¿Le estoy acostumbrando mal? ¿o si por el contrario le dejo en su cuna y si llora le dejo un poquito hasta que se duerme ¿Estoy siendo cruel? Yo supongo que cada uno tiene su opinión al respecto, yo la tengo, pero no sé porque nos emperramos en tener que dejar claro cuál es nuestra postura y dejarle claro a quien no piensa como nosotros el desprecio que te supone la técnica que sigues.
Y digo yo ¿Qué mal hago yo al resto si elijo educar a mis hijos de la forma más naturalizada posible? ¿O qué mal le hago yo a los demás si lo quiero es aprovecharme de las nuevas tecnologías y las nuevas técnicas que han sacado? ¿Y si considero que castigar o dar un par de azotes no está de mas? ¿Soy la peor madre del mundo? O si por el contrario, le dejo a mi hijo libertad y cuando veo que hace algo que no está “bien” le aparto sin más y le digo que eso no y nada más ¿estoy siendo una blandengue y mis hijos me tomaran el pelo.
¿Acaso existe una verdad absoluta a cerca de esto? Pues yo creo que no, que cada familia, cada padre, cada madre y cada niño es un mundo y lo que te puede servir para un niño no te sirve para otro, y que para educar bien a tus hijos lo primero es respetar a los demás, puedo no estar en absoluto de acuerdo con tu forma de pensar, igual que yo puedo preferir el Ribera del Duero como vino tinto y tu el rioja, y no por eso me lanzo como una fiera a criticar.
Así que sí, estoy acojonada, acojonada por si lo hago bien o mal, aunque lo que tengo claro, es que lo mejor será lo que mi instinto me diga, el resto ya se verá..
Palabrita de la niña ratón